Y de feminazis
Hace rato que la Universidad de Buenos Aires dejo de ser una casa de estudios de importancia internacional. Cómo bien señala Milei, hoy es un centro de adoctrinamiento marxista y en ideología de género, muy alejada del pensamiento crítico que caracterizó a nuestra universidad pública.
La formación en economía es deficiente y orientada hacia el marxismo, algo que hoy ningún país del mundo pone en práctica, ni siquiera la “China Comunista”.
La UBA está atrasa teóricamente y bibliográficamente, sólo se adoctrina a los estudiantes en la religión del estado. Los contenidos son arcaicos y ya no forman profesionales de calidad. Más bien se nota un atraso estructural en la formación académica argentina.
Y además del marxismo, se le sumo ahora la ideología de género, a la cual, además de permear toda la formación universitaria, genera una serie de negocios redituables para los intelectuales que adscriben a ella, pero que nada tienen que ver con la ciencia.
La UBA es hoy una universidad de la edad de piedra, con un oscurantismo que a todas luces no va a traer ningún beneficio para el conjunto de la sociedad, pero esto es un problema porque se solventa con los impuestos que todos pagamos. Por eso, cada vez más estudiantes se van a universidades públicas del conurbano, porque más allá del bajo nivel de las universidades k, al menos pueden estar un poco más actualizados.
El que puede hoy no lo duda y se va a una universidad privada, que son las que han ganado terreno en los últimos 20 años. Cada día se hace más patente la necesidad de una reforma de los contenidos de la UBA, y de la necesidad de adaptarlos a los intereses del país, y no de una casta de zurdos que hoy viven de su narrativa.