Alberso y Fiambrola son dos papeloneros internacionales. En el G20 casi le besa las medias a “Juan Domingo” Biden, y el presidente yanqui ni lo registró. Toda la comitiva genuflexa que llevó no sabía si besarle los pies o la boca al presidente del norte.
Nadie les dijo nada del protocolo, y por eso terminaron haciendo un papelón mundial. Alberso estaba franelero, tocaba a todos los políticos, y hasta se rascaba la cabeza. Merkel, la primer ministro alemana se terminó escapando de “toquete” Fernández. Un impresentable total.
Se que que es tan cariñoso que no le alcanza con los gatos de Olivos, sino que ahora anda toqueteando a los presidentes de Europa. Demasiado afecto muestra a las claras que es un presidente que no sirve ni para decorado. Cómo dice Vivi, es un personaje de “Los Roldán”.
Viví es dura, dice que el títere se llevó protocolo a marzo, y está más perdido que turco en la neblina. Eso sí, mientras los presidentes europeos se alojaron en sus embajadas, los Nac&Pop peronchos se alojaron en uno de los hoteles más caros de Roma. El populismo es sólo para unos pocos, porque mientras la mayoría come mierda, ellos viven como reyes.
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