Arroyo explica que el presupuesto 2021 fue hecho sin rebrote de la pandemia, eso no fue considerado, entonces ante una segunda ola del virus aclara que se tendrán que tomar medidas extraordinarias al respecto.
El ve que aumentaron un poco las changas en la industria textil y de la construcción y eso lo miden porque bajó la presencia de las personas que asisten a los comedores barriales.
Aclara que los problemas son el costo de los alimentos y las deudas contraídas, dos aspectos que no se pueden esconder bajo la alfombra, se estima que el 75% de las familias tienen deudas.
Lo grave es la gente que está endeudada y en situación de pobreza, en la clase media se ve como algunos pedalean los pagos de las expensas o prepagas, pero Arroyo dice que para eso hicieron una línea de créditos no bancarios para los que no tienen trabajos formales.
El IFE no está contemplado en el presupuesto 2021, pero si hay un rebrote se tendrá que considerar si vuelven o si se toman otras medidas extraordinarias.
Arrancaron con un proyecto para jóvenes de 18 a 29 años que no estudian ni trabajan y que en pandemia se les hace más dificil aún, y se les da una beca de hasta $8000 para financiar los proyectos que hayan presentado.
Los jóvenes y el endeudamiento de las familias son para él los peores problemas.
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