La abogada ultra k, defensora de la kretina, volvió a realizar un pedido para que dejen libre a la chorra jujeña Milagro Sala, y Novaresio la cruzó con todo por las redes sociales. Novaresio se pregunta como es posible que una funcionaria del senado este pidiendo eso, y quiera pasar por arriba de la justicia. Pero a la razón que intenta oponer el periodista no hay que olvidar que a los kukas no les importan ni las instituciones ni la democracia.
Los kukas son todos iguales, hayan estudiado o no derecho, lo único que quieren es impunidad por todo el choreo que han cometido y que cometen. Son los mismos que se rasgan las vestiduras hablando pestes del neoliberalismo y la corrupción de esos años, pero han repetido la historia, al menos la del choreo, porque pasamos de un neoliberalismo explícito a un populismo liberal, pero la corrupción es la misma, y de los mismos de aquella época.
Néstor, Cristina, y toda la miríada de funcionarios que la acompañan vienen de esa época, con excepción de los jóvenes, y todos fueron funcionarios de el “turco”, así que para hacerse los desentendidos no tienen mucho margen. La forma en que manejan y operan a la justicia solo tiene parangón con la década del 90, e incluso peor, porque hoy la quieren para armar las causas como se les antoje.
Es cierto que a Menem no lo pudieron meter preso, pero el tipo no quiso privatizar la corte. Estos quieren todo para ellos, y no se bancan que periodistas como Novaresio le lleven la contraria. Graciana Peñafort será recordada en los anales de la república como una de las tantas que abrevó en el autoritarismo fascista k para liberar a chorros y delincuentes como Milagro Sala.
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