Boggiano anticipa el desastre económico que se viene.
Nada queda claro, dice el economista, no sabemos, por ejemplo, como se implementan los gastos de tarjetas que se hagan en moneda extranjera. Lo que sí se sabe es que esto es una mala señal porque denota una debilidad bastante clara.
Lo que están contando como reserva, realmente no está disponible, los depósitos que tiene la gente en los bancos forma parte de la reserva, pero no son de libre disponibilidad del Banco Central.
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La gran dificultad es que se sigue agrandando la brecha y todavía no vemos las consecuencias porque la economía viene frenada por la cuarentena.
Los cepos siempre son malos. La salida era antes y haciendo muchas otras cosas, todo lo que había para hacer quedo en el pasado, ya es tarde.
Insisten en la misma idea que parece la crónica de una muerte anunciada expresa Boggiano, esto termina en una brecha mucho más alta, en un blue que va a seguir en ascenso, restricciones de todo tipo y un contado por liquidación que también va a subir.
Finalmente, cuando no se aguante más vamos a tener un súper salto devaluatorio en el dólar oficial y ahí rodaran cabezas. La inflación también va estallar, es inminente y no hay nada que a esta altura se pueda hacer.
