Los zurdos siguen con el mismo discurso desde la Revolución Rusa, y no parece que cambiara nada, siguen siendo tan impresentables como siempre, y están por fuera de la realidad de las personas cada día. Por eso Marra le pega con un caño al zurdaje que se enojan cuando no les aceptan sus pavadas.
La zurda que fue a intratables cree que la revolución se hace con una etiqueta para el consumidor, pero Marra dice que eso no es importante en un país donde hay problemas mucho más profundos para resolver. Los políticos cambian la agenda y los zurdos discuten pavadas en lugar de discutir problemas reales.
Mientras el 50% del pa´ís no morfa, la pobreza es cada vez mayor, y los zurdos quiere discutir una etiqueta en un producto que más de la mitad de la población tal vez ni puede consumir. por eso, traen problemas de Suiza o Alemania, como dice Marra, pero no pueden arreglar los problemas profundos del país.
Los libertarios están dándole en la l´ínea de flotación a los viejos discursos de la política que están cada vez más por fuera de la realidad de lo que vive la gente día a día. Los zurdos de hoy, todos de clase media alta, creen que sus pavadas progresistas le importan a la gente, y que eso es ganar en derechos. Pero un derecho fundamental al que nunca aluden, es al de comer todos los días, que pareciera en Argentina ser un lujo.
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