Durísima con Pablo karuso por sus versos constantes
El “Per Saltum” de la Corte Suprema ha abierto una nueva grieta, o más bien, agrandado la ya existente. Por un lado, están los que, como Viviana, ven necesario que la Corte pongan un poco de orden en las cosas. Y por otro lado, están los que, como Karuso, defienden a “la jefa” de todas las tropelías cometidas.
karuso ya no sabe que hacer para sostener el relato k de avasallamiento de la justicia y de las instituciones. Por eso hacen lo que sea para tratar de salvarle las papas mediáticamente a sus jefes. Por otro lado, están los periodistas que intentan ser críticos, sean opositores o no, aunque el Karuso trate de deslegitimar la opinión de alguien que sea opositor.
El país ya ha perdido el rumbo hace rato, hasta los periodistas están metidos en la trama del poder político, y es muy difícil establecer diálogos o debates sobre los problemas que no pasen por el tamiz de la ideología.
Karuso es el mejor ejemplo del relato k, que trata de tapar el sol con la mano frente a los hechos de corrupción o de ataque a las instituciones. Por eso hay que abogar por un periodismo más transparente, más independiente, y que pueda ser crítico de la realidad en que vivimos. Es hace a una sociedad más sana y más justa.
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