Vidal parece que se tomó la campaña en serio porque anda pululando por cuanto canal de televisión la reciba. Y ahora se agarró con los kukas por el tema de la ley de etiquetado y la de ficha limpia. Dijó que el oficialismo prefiere una ley fascista como la de etiquetado antes que tratar una ley de transparencia en serio como lo es la de ficha limpia para que los corruptos no puedan ocupar cargos públicos.
Estamos discutiendo que no haya delincuentes que ocupen cargos públicos, pero prefieren discutir pavadas, por eso Vidal apela a que la gente los vote para arrebatarles la mayoría al kirchnerismo. Lo que no dice “mariu” es que ellos apoyaron la ley fascista de etiquetado.
Después habló de la ley de alquileres, pero tampoco dice que quien la impulsó fue Lipovetsky, un diputado de su propio partido. Si bien es buena la intención de la “leona”, parece que hay cosas que se olvida cuando llama a posicionar a su espacio como el único capaz de plantarse al kirchnerismo.
Lo cierto, es que tanto Larreta como ella, siempre han sido sumisos a los pedidos del kirchnerato, por eso están preocupados ya que, aún ganando, perderían una parte importante de sus votantes históricos que prefieren hoy por hoy a los liberales porque les hablan más de sus problemas y sus expectativas, algo que la oposición cambiemita no hace.
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