Cristina Kirchner, la reina nac&pop que vive en Recoleta, recibió un escrache de sus vecinos, que simplemente le mostraron su repudio con una bandera argentina con un crespón negro. No la quiere nadie en ese barrio a la chorra que dice defender a los pobres pero no vive en La Matanza, sino en uno de los barrios más exclusivos de la “opulenta” CABA.
La gente les está empezando a hacer sentir su repudió a una casta política que viene enriqueciéndose a costa de empobrecer cada día más al país, mientras ellos viven rodeados de lujos, en grandes departamentos, disfrutan de todos los privilegios que pueden, entre ellos vacunarse primeros, y vacunar a su personal de servicio.
Porque los nac&pop admiran Cuba, pero no para vivir. Para vivir les gusta el modelo yanky con personal de servicio como corresponde a las grandes familias adineradas, jardinero y chófer. La doble vara kirchnerista del haz lo que yo digo pero no lo que yo hago.
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