Cada vez que aparecen los KK hay que aplaudirlos, esa es la meritocracia KK, ayer hubieron KK que no aplaudieron a su majestad, seguramente serán quemador en la hoguera.
Valoran más la lealtad que la eficacia explica Joni, lo piensan como una religión en la que hay que venerar a una diosa que sería el líder y no aplaudirlo significa un sacrilegio.
Después aparece un tuit de Alicia Castro hablando de los “Trolls y las Trollas”, cuestionó a los que no aplaudieron a la reina durante el acto, también pensando al líder como un ser supremo e incuestionable.
El más criticado por la militancia de su majestad fue Juan Pablo Biondi que se encarga de la publicidad presidencial y que viene del riñon de Alberso, dicen las malas lenguas que en ese puesto quieren poner a alguien cercano de Kiciloff.
El acto fue una muestra más de la grieta interna que hay en el reinado KK, que a Alberso ya le soltaron la mano por no cumplir con lo único que se le encomendó que era la limpieza de las causas de corrupción.
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