La semana pesada Guzmán salió a decir que tenía la situación cambiaria bajo control, dijo que habrá un ajuste del tipo de cambio y que estos controles serán transitorios , están tomando medidas cortoplacistas apuntalando a las elecciones de octubre.
La estrategia principal es la de pisar el tipo de cambio y devalua a un ritmo muy inferior al de la inflación. En los años 2007 y 2011 son los años en los que más se apreció el tipo de cambio.
Esta estrategia logra una mejora artificial que en realidad no existe, luego de las elecciones se sentirá la piña, que nos vamos a dar de golpe, cuando se sinceren los números reales de la economía.
En febrero y enero tenemos picos de devaluación que llega a puntos del 45% que es a una velocidad extraordinaria. Además que no estaría cumpliéndose la meta del presupuesto del 2021 de llegar al 29% de inflación.
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