Mientras el conurbano estalla por la falopa, la pobreza y la delincuencia, los funcionarios se la pasan tuiteando como forma de hacer política. Y encima, lo peor de todo es que se pelean entre ellos. Aníbal Fernández, sin ir más lejos, publicó en su tuit que quienes hayan comprado falopa en las últimas 24 horas que la descarte porque “es de la mala”.
En lugar de generar políticas de prevención contra las drogas y contra la delincuencia se la pasan diciendo tonterías en las redes, y cuando la gente se enoja, le echan la culpa al “comunity manager”. Son realmente livianos para todo, por no decir que son cómplices de todo lo que sucede.
El conurbano está realmente caliente, y el gobierno en lugar de intervenir mira con pasividad, o interviene activamente soltando narcos y delincuentes. A ellos no les importa ni combatir el narcotráfico ni la inseguridad porque llevan impresa en la mente las ideas Zaffaronianas de que los delincuentes son víctimas.
Con políticos así dificilmente el país tenga salida. Mientras lo fácil y aceptado sea delinquir y vender drogas, Argentina tiene el triste destino de convertirse en Colombia o México, que si bien están mejor económicamente que nosotros, viven con un flagelo atroz vinculado a la falopa, la política y las instituciones estatales.
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