Los muchachos kirchneristas se creen que pueden andar saraseando a cualquiera y está todo bien. Quisieron hacer lo mismo que hacen acá con el Fondo Monetario Internacional y se les rieron en la cara. Por eso el acuerdo está en riesgo, dado que presentan datos que nadie cree, y que encima son incumplibles.
En el presupuesto que presentan hablan de un crecimiento del 4%, algo que el fondo no cree ni en broma. También dice que la inflación va a ser del 30%, algo realmente imposible con el nivel de emisión que les manda a hacer la jefa para sostener la paz social.
Y por último, hablan de un dólar de $130, algo todavía más inverosímil cuando se sabe que no hay dólares y cada vez son más demandados por una población que quiere resguardar sus ahorros frente a la debacle económica producto del exorbitante déficit fiscal para mantener vagos y planeros.
Lo cierto es que nadie ve posible lo que plantea Guzmán y en el fondo le pidieron que deje de dibujar números. El tribuneo tiene un límite y si no se toman en serio lo que proponen en materia económica el año que viene va a ser peor que el actual. La incertidumbre hoy es tan grande que la gente compra lo que puede porque ahorrar no sirve para nada.
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