El escándalo de Olivos sigue creciendo, aunque el gobierno hace todo lo posible por tapar el chanchuyo de saltarse la cuarentena mientras a todos nos ponían restricciones que violaban nuestros derechos, pero que al parecer, algunos tenían pases vip.
Ya se inició una investigación judicial, dado que ninguno de ellos tenía nada que hacer en la quinta residencial en esa fecha, salvo que, como todos pensamos, hay dos argentinas, una la de los ciudadanos comunes, y otra la de la élite peronista que parecieran querer estar por arriba de todas las leyes.
Y no es extraño que esto pase, dado que la jefa política cree estar moralmente por encima de todos, y no quiere dar respuestas por los hechos de corrupción de su gobierno, así que a nadie extraña lo sucedido con el matrimonio presidencial, dado que son tan impunes que hasta llevaron colorista y personal trainer.
Mientras nadie podía reunirse a festejar un cumpleaños, ellos armaban fiestas íntimas, incumpliendo los mismos decretos que firmaba el propio presidente. Por eso para Tato, tienen que explicar porque le garpamos el sueldo a esta gente. Los líderes políticos parecieran querer posicionarse por fuera de la república, y se creen inmunes a las leyes, por eso es necesario que alguien investigue y que en todo caso, la condena sea ética y moral.
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