Se viene un vencimiento de deuda y la guita no está. Estamos con la soga al cuello y el temor del kirchnerismo empieza a notarse. Y ya, la debilidad del gobierno se huele a distancia, sobre todo porque viene con un historial de falta de poder, dado que quien gobierna es la vicepresidente.
Por eso, ahora salieron los sindicatos a pegarle al títere, ya que la inflación pega duro en los bolsillos de los trabajadores, así que ahora tienen que poner la cara por los suyos contra un gobierno incapaz de poner orden. Lo que están pidiendo es la reapertura de paritarias porque la guita no alcanza para llegar a fin de mes.
Y los que más locos están son los de aerolíneas, que el año pasado lograron el 52% de aumento, algo que no le paso a todas las actividades, y aún así ahora van por más. Lo que si hay que hacer notar, es que la aerolínea de bandera nos costo, desde la reestatización, el valor de 5 YPF. Es decir, pusimos 5 petroleras para bancar una empresa que nos da pérdidas y con un servicio caro e ineficiente.
Los que mejor están van por más aumento, y no les importa para nada si las pérdidas las seguimos pagando nosotros, total, ellos ya tienen el carguito. Alberso está tan débil que hasta el FMI ahora le mide el aceite al títere, dado que no toma ninguna decisión de verdad desde hace 2 años. El acuerdo se embarró por las propias indecisiones, y por los frenazos de la kretina.
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