En su desesperación, la madre de una niña con capacidades diferentes le suplica a la infectadura que considere la re apertura de los centros terapéuticos para que los niños como Camila y muchos otros en su situación puedan volver a su terapia habitual. La niña hace ya 120 días que no puede concurrir a su tratamiento por la cuarenterna, a esto se le suma que la obra social no habilita el sistema para que pueda realizarlo en su domicilio.
No se reciben respuestas, como muchas familias, no se sienten acompañadas ni reciben ningún tipo de ayuda como el oficialismo nos quiere hacer creer.
A los Kukas lo único que les importa es robar, de verdad crees que te están cuidando?