A Cafiero le queda grande el puesto y lo dejó en evidencia con su discurso en Dubai. En realidad tendría que haber dado su discurso en su idionma nativo y entonces le tocó hacerlo en inglés de forma imprevista porque no había traductora simultánea pero no supieron preveerlo.
Otro papelón fue cuando difundieron en el acto en Dubai un video, que le debe haber costado millones al país, para presentar la Argentina frente a las cámaras de inversiones de cientos de países y el video salió sin sonido, otro pequeño imprevisto debido a la improvisación de la comitiva.
La bajada de línea de estas faltas de respeto son de Alberso cuando se quiere hacer el hombre común o de apie e improvisa diciendo barbaridades o mismo en las redes cuando Alberso retuitea insultos a otros periodistas cuando lo hizo con lo de “gordito lechero”.No es Santiado de San Isidro insultando a Lanata sino que es un Canciller con una investidura el que lo dice, parece que no toman consciencia de eso.
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