El kirchnerismo no te deja ni disfrutar de un heladito
Los argentinos solíamos esperar el veranito para disfrutar un helado tirados bajo el ventilador o el aire acondicionado viendo una buena pelí, o eso era al menos hasta el “oscuro reinado de Macri”, porque en la era de la “prosperidad” kirchnerista, hasta engordar tranquilos es un lujo. Un kilo de helado sale una luca, y se ha vuelto consumo de lujo que no alcanza ni con el ahora 12 porque encima te cobran impuesto.
Las heladerías también están pagando el precio de la crisis, porque con esos precios es difícil que puedan vender como en temporadas pasadas. El aumento de precio tiene que ver con el costo alto de los alimentos, lo que hace que el producto elaborado sea caro. Sobre todo el helado artesanal que tiene mucha materia prima de calidad.
Todo redunda en un ataque a la rentabilidad de los heladeros, que ven bajar las ventas a medida que sube el precio. Es cierto que hoy $1000 mangos no es tanto cuando uno va al supermercado, se nota mucho, pero claro, no todo el mundo tiene para gastarse ese dinero en un lujito de fin de semana.
El kirchnerismo no sólo trae pobreza, también trae escasez, imposibilidad de consumir y hambre. Hoy les toca a los heladeros, pero todos los sectores están en crisis por la mala gestión presidencial de la inflación y del dólar.
También te puede interesar: