El kukerio ha destruido todo, incluida la educación, y cómo no quieren que se sepa el desastre que han hecho suspendieron las pruebas “aprender” que medían el grado de conocimiento que tenían nuestros pibes, para con eso mejorar la calidad educativa.
Pero no contentos con esto, la necesidad de ocultar los pésimos datos que tienen, dado que más de 1 millón de pibes dejaron la escuela por la cuarentena, ahora quieren que nadie repita el año. Una especie de up grade para “todes” para no mostrar la inutilidad de una virtualidad que dejó en evidencia no sólo la baja calidad de los docentes, sino de la educación impartida a los chicos.
El gobierno de la ciudad, por su parte, se desmarcó de está locura por considerar que es otro incentivo más a no querer aprender y no sirve absolutamente para nada. Sobre todo, en un distrito que, a pesar de las trabas políticas y sindicales, logró mantener bastante la presencialidad.
Pero la realidad es que ha sido tan dispar y temen que se note que han perjudicado a quienes menos tienen, porque mientras los chicos que están en escuelas privadas o que tienen recursos, pudieron continuar con el aprendizaje, en los barrios populares la escuela no apareció más, y saben que han generado un verdadero problema a futuro, por eso, la única estrategia que tienen es esconder la mugre bajo la alfombra.
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