La producción sigue en caída y el dólar sigue incierto. Hay tantas restricciones a las importaciones que muchas industrias están casi paralizadas por carecer de insumos. La caída es del 5% y es una de las más altas del año.
Si bien hay una suba respecto al año pasado, donde estuvo todo parado, pero lo cierto es que no hay un verdadero crecimiento, sino es un repunte frente al casi cero de la cuarentena del año pasado. La realidad es que esta todo bastante parado y la reactivación es casi una utopía.
Las limitaciones a las importaciones es también un golpe duro, ya que a la escasez de insumos se le suma la inflación por la cantidad de bienes escasos que empiezan a haber. Casi un axioma básico de la economía que el gobierno parece desconocer.
Las empresas tienen lineas de producción completamente paradas, y además faltan bienes de consumo como neumáticos o autopartes. Pero no sólo esto, sino que son muchas los bienes faltantes y que están impactando directamente en el precio de muchos productos.
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