La mediática infectologa militando la cuarentena de Alberso
Otra vez la infectóloga k impresentable hablando pavadas. Peretta la destrozó a esta militante de la cuarentena y del miedo. Cómo dice Peretta todos los años se colapsan las guardias de los hospitales y las camas de terapia intensivas por enfermedades respiratorias.
De hecho, la cuarentena es tan absurda que es algo que se usaba hace 500 años para aislar a los enfermos, no a los sanos. Lo más gracioso, es que con cuarentena y todo tenemos 130 mil casos, con el perjuicio económico que esto trajo al conjunto de la población.
A diferencia de la militante k de la cuarentena, Peretta se queja de que se cerró con 5 casos por día, y hoy que hay mas de 4 mil casos diarios se flexibiliza, marcando las inconsistencias en las decisiones de la infectadura k que nos viene gobernando hace varios meses.
Lo que propone Peretta es que la cuarentena sea inteligente y se tendría que haber aislado a los grupos de riesgo y no a toda la sociedad, sobre todo a la gente sana y con pocas probabilidades de enfermarse, o si lo hiciese, con muy pocas implicancias para la salud, casi como una gripe común.
La infectóloga k repite el relato que desde hace meses viene llevando adelante Alberso y su banda de delincuentes, que aprovecharon la cuarentena para limpiarse causas, intentar expropiar una empresa, y hacer negociados con el alimento que era para la gente necesitada. Una guachada.
La realidad es que hoy se flexibilizó la cuarentena, aún a pesar de que estamos en la peor etapa. Lo que se hizo fue quemar las naves y se hizo una cuarentena demasiado temprana. Pero cómo pasa en argentina, nunca nadie da la cara y la culpa la tienen los otros. Ya la peronchocracia le echo la culpa a los runners o a los que protestaron frente a los avances del estado por sobre la propiedad privada, o los chetos que viajaron al exterior.
La infectadura está casi llegando a su fin, y vamos a empezar a contar los verdaderos muertos, los muertos de la crisis económica, la de los cierres de comercio, la que está dejando la delincuencia liberada por los k, y un desierto al que todavía no se le ve el final.