Grabois estuvo con Novaresio, y el periodista le dió con un caño al dirigente piquetero. Los Ceos de la pobreza quieren limpiarse la mugre de vivir de los pobres y que la sociedad ya se dio cuenta que son puro relato, y por eso se enojan diciendo que el poder real los ataca.
Cómo dice Novaresio, el dirigente piquetero se la pasa diciendo que la culpa es de todos los medios hegemónicos, y uno podría hablar de los dirigentes sociales berretas, y no lo hace, porque hay gente que sabe tener respeto por otros. Grabois es un chanta que repite el relato kirchnerista y lo que realmente quieren es más caja.
Los Ceos de la pobreza están en pie de guerra porque están peleando que Alberso les de más caja para poder seguir controlando a los pobres. Lamentablemente este es el nivel de dirigencia que hay en el país, tipos que se erigieron como líderes de los que más necesitan, y los usan para hacerse millonarios.
Son parte del club de ricos de la argentina, la oligarquía política que se ha encaramado en la cúspide de nuestro país, y lo está llevando a una de las peores decadencia de nuestra historia. Grabois no es más que un ejemplo de lo que abunda en la política, un tipo que se cree el salvador, el redentor de los necesitados, pero no es más ni menos que un mercachifle que la junta toda para él.
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