En la Casa Rosada no estaba ni el loro. Ningún funcionario parece muy afecto al trabajo dice Tato, todos los ministros llegan a las 11 de la mañana, con excepción de Kafierito que es el único que llega temprano todos los días. Parece que los problemas de la Argentina pueden esperar a que los muchachos y muchachas peronistes desayunen bien.
Ni siquiera en una semana de crisis como es esta que se está yendo van a laburar temprano, se ve que se quedan viendo series hasta tarde y al otro día no se pueden levantar. O tal vez, organizan alguna “clande” en la quinta residencial y se pasan la noche de joda.
El país es un hervidero de conflictos, internas, pobreza y desempleo, y quiénes tienen la responsabilidad de gobernar no se lo toman en serio. Son una comparsa de impresentables que solo han llegado a conducir el gobierno para tapar las causas de la “jefa”.
Mientras tanto, quiénes quieren poner a la Argentina de Pie en serio, los que laburan todos los días: trabajadores, comerciantes, empresarios, etc., se encuentra con trabas, políticas absurdas y un socio como el estado que le cuesta cada día más caro a quiénes se dedican al sector privado. Para eso son rápidos, y donde nace algo para financiar, nace un impuesto, total lo pagan los que laburan y ellos lo disfrutan como más les parece.
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