Ambos coinciden que la pica entre Berni y Frederic evidencia el grado de descomposición política que hay en el gobierno. Se intercambian figuritas entre Alberso y Kretina, uno pidiendo la cabeza de Berni y la otra pidiendo la cabeza de Frederic.
A esta altura Alberso está agobiado por demás, aunque todavía no haya cumplido ni la mitad de su mandato y la vice ya no le cree al presidente. Están metidos en todos los escándalos y se dedican a todo menos a gobernar, tienen una agenda que es ajena a los intereses de la gente.
Para la Cámpora Alberso es el presidente que no preside y el funcionario que no funciona porque no le soluciona sus problemas familiares en la justicia. Para Feinmann este grado de descomposición interna es enorme.
La Garcámpora a y Kretina tiene el manejo de todas las cajas y aún así se quejan de este gobierno y las internas en los ministerios son feroces. Este gobierno es una contradicción permanente y no salen de los temas que los ocupan solamente a ellos.
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