López Murphy está re caliente porque el ministro de la deuda se la pasó hablando de dialogo y no fue al congreso a explicar cuáles son las bases del acuerdo con el FMI. Y todo eso porque en el congreso no es como ir a una reunión con los gobernadores que te palmean la espalda, y sabía que se le venían críticas.
Para Ricardo López Murphy el problema no son los organismos internacionales sino la propia Argentina. El déficit fiscal monstruoso para mantener militantes y planeros se está comiendo la capacidad económica del país y las empresas ya no invierten ni generan empleo.
El país no crece, y encima, el año pasado con los precios excelentes de los commodities se perdió una oportunidad excepcional para generar divisas. Pero como les gusta mucho el cepo, eso no ocurrió como se esperaba. Y este año, para colmo, hay sequía y los precios internacionales bajaron.
Aunque el problema de fondo es la emisión descontrolada. En diciembre se emitieron pesos de monstruosa y cada vez se hace más difícil seguir reteniendo la inflación de manera artificial, ya que las leliqs es una bomba que en cualquier momento genera un estallido monetario sin precedentes.
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