Tienen que acordar con el fondo para no irse en picada, pero como dice Loidi, no tienen plan. No saben que hacer con la economía en ninguna de sus aristas. No saben que hacer con la inflación, el gasto público y la macroeconomía.
Por eso dice Loidi, si no hay plan no hay acuerdo, o en su defecto, te lo imponen ellos, algo que pareciera que no quieren aceptar en la alianza gobernante. Y encima, el hecho se agrava cuando salen a decir que van a expropiar empresas, el cepo, y cosas por el estilo.
Y lo peor es que ya hicieron una “convocatoria de acreedores”, y ahora están diciendo directamente que no van a pagar. Por eso siguen metiendo más cepos, lo cual está creando dolores de cabeza a quiénes producen, dado que es imposible traer insumos importados para reponer piezas o para producir otros bienes.
Tal como en el caso del sector automotriz, en varios sectores de la economía el desabastecimiento amenaza con llevarse puesto a un gobierno que no quiere largar más dólares, en un mercado virtualmente parado y en recesión, donde lo que se vende es, básicamente, por la oferta inflada del gobierno.
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