La nueva idea novedosa del kirchnerismo es estatizar las prepagas. Lo que vienen haciendo es pisar las tarifas de las empresas para que queden desfinanciadas y sin capacidad operativa así se las puede quedar el estado, o lo que es más claro, la Cámpora, que son quiénes están detrás de las cajas de la salud.
Y también pareciera que van por las cajas de las obras sociales con la idea de armar un “sistema integrado” en el cual sean ellos los que manejan todo. El tema es que todo es relato, y la épica de la salud pública la utilizan para atacar a las empresas prestadoras y las obras sociales sindicales dado que quieren quedarse con todo.
El kirchnerismo es voraz y no se detiene ante nada para hacer negocios. La excusa de la estatización esconde detrás todo el negocio de la tercerización de la gestión de los prestadores, la importación de insumos, y las empresas amigas que se dedican a proveer de materiales al estado.
Todo está pergeñado para que un estado ineficiente avance sobre las empresas privadas y así ir creando las condiciones de un socialismo k, cuya mayor característica es la pobreza, como hemos observado en países como Venezuela en dónde el estado es dueño de todo, pero no hay nada para la gente, y tienen los peores índices de pobreza del mundo.
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