La Argentina tiene una obsesión que se llama Cristina Fernández y Cristina tiene una obsesión consigo misma dice Miguel Wiñazki.
De pronto es santa Cristina, trémula y terminante, en un acto mágico esta afirmando implícitamente de pronto que Los Sauces, Otesur y Lazaro Baez no existen. Toma el papel de victima, pero no deja de ser quien es.
El dúo Cristina-Anabel Fernandez Sagasti es peligroso, esta no hace más que replicar los dichos de su ama y señora. Esto es Chavismo!
Alberso no puede frenar el avance de Kretina, esta llena de poder. Ella siempre gana, y lo que pretende con esto es tutelar la vida de la gente, esto se llama Chavismo, quiere hacernos creer que el Estado nos va a cuidar
Los argentinos debemos dejar de naturalizar y tener memoria