Filmus, el perdedor nato del kirchnerismo, y que ahora volvió por obra y gracias de la kretina se queja de la actitud de Milei, al que categoriza como violento, pero se ve que no mira mucho hacia la propia violencia doméstica que tiene su propia jefa.
Le molesta que Milei está encarnando las preocupaciones populares que ellos han perdido, y hoy la gente que no vive del estado está más con los liberales que con los populistas estatistas. A Filmus le molesta la verborragia de Javier, pero parece que no le molestan los exabruptos de los funcionarios y dirigentes de su propio espacio.
Milei está ocupando los espacios que dejan los frentes de ambos lados de la grieta, y de las que muchos se han distanciado por decepción, sean de izquierda o de derecha, lo cierto es que ni Juntos por el Cambio, ni el kirchnerismo han logrado canalizar las expectativas de mucha gente que hoy busca una tercera opción.
Y el kirchnerismo lo sabe, por eso se han aliado con Larreta para pegarle al economista liberal. Saben que es un enemigo potente, con un discurso claro, y que puede posicionarse por fuera de la propuesta alternativista de los dos frentes políticos más grandes del país hoy.
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