En la marcha peroncha no se vió a ningún laburante, parar un país festejando que subieron un par de puentos en el conurbano, un miércoles que en vez de producir alteran todo.y además no hay nada que festejar con veninte millones de pobres, la economía destrozada, con el dólar en alza, las reservas en baja.
Reducen el país al conurbano, con el plan platita no les alcanzó para dar vuelta una paliza anunciada. El presidente queda como un puntero político de la Garcámpora que convoca a este despliegue de masculinidad militante un día de semana que paran el país en vez de producir.
Ninguno de los que está ahi paga salarios, ni vive con un sueldo miserable, ni paga ganancias, ninguno paga impuestos o con una jubilación mínima mientras la jefa pol´tica cobra arriba de dos palos mensuales de jubilación, esa marcha es una imagen que atrasa el país cincuenta años.
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