Pierden bolsos, misiles y balas
Afanaron 3.000 tiros de FAL, pero para el ejército no van. A Rossi, el ministro de seguridad, no es la primera vez que le roban armas. Ya en el anterior gobierno le robaron un misil y armas.
La pregunta que se hacen Baby y Feinmann es a dónde van a parar esas municiones, porque para las fuerzas de seguridad no van. El miedo de todos, es que estas municiones terminen en las manos de los delincuentes que se dedican a tomar tierras en el sur, o en el resto del país, donde ya recurren a cualquier argucia para pasar por arriba el derecho a la propiedad que consagra nuestra constitución.
Desde la excusa del feminismo hasta el indigenismo, pasando por el pobrerismo, y con el aval del Papa, hay grupos que se dedican a subvertir el orden democrático en nuestro país, y el gobierno no sólo mira para otro lado, sino que los avala con sus funcionarios participando activamente de estas acciones.
La democracia está cada vez más en riesgo por grupos violentos que creen que pueden acceder a derechos por medio de la fuerza y pasando por encima de los derechos de otros ciudadanos. Pero no es algo sólo de argentina, sino que es una especie de monstruo que está recorriendo todo latinoamérica.
También te puede interesar: