Espert está a full con la campaña para llegar a diputado, y quiere llegar para, entre otras cosas, meterle un juicio político a Alberso por la mala praxis sanitaria, y por el desastre económico que viene llevando adelante. Por eso va con Píparo, a ver si pueden derrotar al kirchnerismo en estas legislativas.
Espert proponía un gran frente opositor para ganarle por paliza a los k en la provincia, pero no se pudo lograr una gran paso entre todos los actores anti k, sino que afloraron, según Espert, los vedetismos individuales que tanto mal le hacen a la política.
Necesitamos dirigentes a la altura de la historia, de lo que esta nos plantea, y como ir resolviéndola. Pero, lo que tenemos, es una serie de dirigentes ombliguistas, oportunistas y que sólo piensan mantenerse en el negocio de vivir del estado.
Espert está yendo con todo, porque sabe que queda poco margen para que no se lleven puesta la república. Está todo para atrás y necesitamos que en estas pasos los kirchneristas sientan el rechazo popular por lo que vienen haciendo con el país, al que están llevando a la peor de las crisis.
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