El gobierno viene para atrás y para Espert falta profesionalismo porque ni han presentado aún el plan de trabajo para presentarle al Fondo Monetario Internacional. Y además de nuestras desprolijidades, está la cuestión que el país no quiso firmar la declaratoria de la OEA junto a otros países como pedía Estados Unidos, país que define en el fondo los acuerdos.
El conflicto Rusia – Ucrania y nuestra postura impacta de lleno en las posibilidades de acuerdo y en estar dentro o fuera del mundo. Por ahora son todos dichos pero no hay nada firme, junto a una política exterior ambigua, lo que se avizora es un futuro negro para Espert.
Además, dado que el presidente invitó a que Argentina sea la puerta de entrada de Rusia en América Latina, es probable que los yankees no se queden tranquilos y empiecen a cobrarle al títere todos los papelones que viene haciendo a nivel internacional.
No tiene sentido del contexto histórico, y cómo responde a los pedidos de la jefa K no es capaz de una posición clara, por eso no sabe como actuar frente a hechos concretos porque no quiere dejar mal a nadie, ni a los rusos, ni a su jefa ni a los yankees, pero como dice el dicho, no se puede estar bien con dios y con el diablo.
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