Los derechos hay que enunciarlos, pagarlos e instrumentarlos, cuando Carusso se llena la boca hablando del derecho a la vivienda, no puede justificar que los KK se llenan la boca hablando de los pobres y son todos ricos.
El Gobierno fue cómplice de las tomas porque desde el día uno se podría haber manifestado en contra pero no lo hizo, esperó y hasta funcionarios salierona a bancar los tomas posteando en twitter, pero Carusso sale a la defensiva argumentando que Grabois no es un funcionario, claro que nó pero participa del Gobierno ya que es parte del Frente de Todos y le es funcional a La Jefa.
Porota escribió una carta que podría haber sido una gran oportunidad de llamar a la Unidad Nacional, habiendo tenido los cargos más altos en este país, pero no fue moderada y sólo llamó al diálogo.
Carusso salió al cruce y a decir que hay que” leer permanentemente la Carta de la Vice”, cual mantra suponemos, para entender que “ella se está dirigiendo a todos los sectores de poder”.
Y hablando de los factores de Poder, la Iglesia, especialmente el Papa apoyó siempre al gobierno popular de Porota.
Carusso defiende que Kretina se corre del centro de poder porque caso contrario se hubiera postulado y que ella siempre entendió que el Gobierno tendría que ser un gobierno de coalición.
Para gobernan una alianza de semejante tamaño es casi imposible los sectores progresistas como Delia o Hebe no se lo bancan a Alberso.
Este no es un gobierno de coalición, sino que tiene una trampa conceptual , la alianza puso a uno como un chivo expiatorio que va a ser quien reciba los sopapos.
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