La kretina debe querer que se termine pronto este 2021 porque fue un año de puras malas noticias: perdieron las elecciones, no les aprueban el presupuesto, y la cámara de casación está poniendo en orden las cosas respecto a las causas que fueron armando durante estos años.
La teoría del lawfare se está cayendo a pedazos por todos lados, y ya no pueden esconder el nivel de corrupción de los gobiernos kirchneristas, en dónde se hicieron millonarios los secretarios, jardineros y chóferes de los kirchner, entre tantos otros. Esto sin contar a los funcionarios de distintos rangos que se pararon para toda la cosecha.
La política en nuestro país se acomoda económicamente robando los recursos públicos para sus propios intereses. Llegan pobres y se van ricos, y acusan a los medios y a la oposición de espiarlos a ellos, pero se les va cayendo cada uno de las mentiras.
El juez Ramos Padilla hizo bien su trabajo sucio y lo premiaron con un juzgado en La Plata, pero por suerte hay todavía instancias en la justicia que van acomodando las cosas como corresponde y desarmando las operetas que hicieron los k durante los últimos años.
También te puede interesar: