Hay que hacer un cambio radical
Espert contundente.
Yo ingrese en la política hace menos de dos años expresa el economista, en este tiempo puedo asegurar que salvo alguna excepción la ley de la política es la traición.
El que hoy te abraza mañana te clava un puñal, sin miramientos. Lo que le pasa a Alberso es que sabe que fracaso y no lo puede disimular, muestra mucha envidia, rencor y miseria.
El rol de Cristina en el gobierno es central. Si por ella fuera estaríamos con un rumbo clarísimo a Venezuela, lamentablemente en Argentina puede pasar cualquier cosa.
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Venezuela es un país que es una catástrofe humanitaria, nosotros aun no somos eso. Con un gobierno KK vamos a tener seguramente actitudes fascistas y avances sobre las libertades individuales, pero eso por suerte no nos convierte en el país bolivariano.
La verdadera discusión que viene ahora es si vamos a comer o no. No si vamos a ser Republica o Venezuela, esas son cosas que quiere instalar la oposición con un país que está a punto de experimentar grandes problemas de pobreza, de hacinamiento, de proliferación de villas y gente sin futuro. Estamos al borde del no retorno.
Hay que plantearse hacer un cambio radical, nada en nuestro país funciona bien. Estos cambios corresponden al sentido común y es lo que hacen los países del primer mundo.
Comerciar, no vivir de la mentira, un tamaño razonable del Estado, por lo tanto, no hay esclavos impositivos y leyes laborales que promueven la creación de empleos formales.
Este es el país de la dádiva y el populismo, lo que crearon los peronistas en el gobierno. Donde el vago recibe dinero de los laburantes