El estado se ha vuelto un depredador serial en el medio de una pandemia en donde los comerciantes y las pequeñas empresas venden cada vez menos pero pagan cada vez más de impuestos. En Arroyito un comerciante se planto en el concejo deliberante para decirles de todo.
Los comerciantes están podridos de que los políticos siguen cobrando sueldos imponentes mientras que los que laburan se están fundiendo, por eso este comerciante se calentó y les dijo en el concejo deliberante que no van a poder salir ni a tomar un café. Como dice Baby, la gente está empezando a reaccionar y los van a perseguir, sobre todo en los pueblos chicos, en donde los políticos chorros no van a poder salir a la calle.
Para Baby, todavía estamos adormecidos, y son pocos los argentinos que recién empiezan a quejarse, porque todavía tienen miedo de un estado que se parece cada día más una dictadura que una democracia. Pero como el gobierno sigue fuera de la realidad, mirando para otro lado, mientras los problemas de la gente se acentúan cada vez más.
Baby está caliente porque encima en el gobierno siguen pateando la pelota y le echan la culpa a la gente y a los periodistas en lugar de hacerse cargo de los desastres que vienen haciendo hace más de un año.
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