La muerte de Mauro Viale desató una ola de reflexiones, críticas y ataques que nadie se esperaba. Por un lado, una de las cosas que vienen desatando las discusiones más enconadas es la compra de vacunas. Hasta ahora, solo podía comprarlas el estado nacional, pero como han hecho tanto desastre, ahora dicen que “siempre” estuvo abierto a que compren las provincias.
Tan es así, tan mentirosos y cínicos, que hoy Alberso hizo un tweet sobre Mauro como si hubiera perdido a un gran amigo, y como dice Viví, el año pasado retuiteó “gordito lechoso” para pegarle a jony Viale. Lo que dice Canosa, es que nadie le cree al gobierno, y ese es el gran problema.
El gobierno de los Fernández es una sarta de verso, calumnias y negociados, incluso, es un gobierno que habla del pueblo pero son todos privilegiados que han vacunado a sus familiares y amigos antes que a las personas de riesgo. El discurso que hoy nos quieren vender, dónde los culpables de la segunda ola somos nosotros está generando aún más desgaste, no sólo porque quienes vienen promoviendo los contagios con ellos con las marchas, sino porque lo único que parecía protegernos, las vacunas, se las afanaron.
Y ahora le piden a la sociedad nuevamente un esfuerzo. A una sociedad que viene hastiada del encierro, con problemas económicos, incluso con desempleo o riesgo de perder las pequeñas y medianas empresas. Pero nada les importa, tan sólo salvar a Cristina y ganar la próxima elección. El pueblo: que se joda.
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