Guzmán maneja cada vez menos cosas, y más que un ministro de economía parece un cadete del Instituto Patria. Cómo dice Cachanosky, el problema es que hasta Kicillof se mete en las decisiones económicas y eso genera aún más desastres de los que hay.
Las medidas del gobierno rayan en lo ridículo y en lo absurdo en lugar de estar en las decisiones importantes. El ejemplo que pone Cacha es el de la secretaria de comercio Paula Español que anda con un centímetro recorriendo supermercados midiendo donde se encuentran los cartelitos, mientras tanto, la inflación sigue avanzando.
Lo único que saben hacer es prohibir y atacar a los sectores productivos, total lo solucionan con impresión de guita para los planeros y todos contentos. En Argentina, quienes producen ganan cada vez menos porque los impuestos son tremendos, y estamos peor que el resto de los países de Latinoamérica. Incluso, nuestro PBI, según Cachanosky, es igual al del 2007, es decir, retrocedimos 13 años.
Y para colmo, los niveles de consumo y producción son los mismos que los de 1975, con lo cual, seguimos retrocediendo décadas, mientras tanto, el kirchnerismo sigue apelando al relato, y la gente común se hunde cada vez más en la miseria.
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