Peronismo para todos
Estamos peor que en el 2001: desocupación, quiebre de empresas, inseguridad, pobreza. Un lujo vivir en la República Peroncha de Covidia. A todo esto, seguimos encerrados, sin poder circular ni trabajar, y no se ve claro cual es el camino para el futuro.
Adorni es categórico, después de 6 meses vamos de un lado para otro, expropiaciones de las que después se dan marcha atrás, leyes de alquileres entre gallos y medianoches, y la corrupción a todo vapor. “No pueden comprar fideos y quieren manejar Vicentin”, brillante. Esta es la realidad de Argenvidia hoy.
Parece que el camino es la estatización, pero la realidad es que hemos perdido todos los juicios post intervención estatal, con lo cual uno podría preguntarse para que todo esto. La gilada aplaude y se pone contenta pensando, por una especie de operación intelectual de osmosis, de que son dueños de lo que el estado compra. La verdad es que ha terminado siendo negocios de la kampora y amigos. Pero bueno, todo sea por mantener la tropa con planes y fideos.
La indecisión y la falta de certeza acerca del futuro está a la orden del día. Si no se dan señales claras del rumbo económico y sanitario el 2001 va a ser un sketch de Les Luthiers. El gobierno tiembla e imprime billetitos, si no hay un cambio de timón ya no va a alcanzar con que te pidan quedarte en casa, porque te van a llevar a decidir entre enfermarte o comer.