En el programa de Fantino una feminazi se la agarró con un abogado que le destrozó los argumentos. Siempre repiten lo mismo y el abogado le demolió las falacias que decía la feminazi. Lo que dice el abogado es que basta que con una mujer diga cualquier cosa para que un hombre termine preso.
Y con esto lo que se logra es una gran desigualdad total del acceso del hombre a la justicia cuando alcanza con solo una palabra para poder condenar a alguien sin necesidad de aportar pruebas. Las feminazis quieren que los tipos vayan presos porque sí.
El caso Gianola pone en evidencia el total usufructo que hacen algunas mujeres para ganar juicios invocando la violencia de género cuando no tienen pruebas de otro tipo. Atenta contra todos los derechos garantizados por nuestra constitución.
Este tipo de ideología de género hace que con sólo un testimonio un varón termine en cana o moralmente condenada sin más que eso. Se viola el principio de inocencia que es algo que la jurisprudencia ha mantenido en nuestra constitución desde el nacimiento de la nación. Para las feminazis todos los hombres son culpables.
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