Feinmann con Viale mano a mano.
Aparentemente, cuentan que hay un cambio de gabinete, por primera vez se va una ministra y aquí es donde comienza a cobrar sentido la carta de CFK cuando habla de funcionarios que no funcionan.
Biellsa, ministra de desarrollo social es la que se va, aparentemente esta situación no sorprende en el bloque oficialista, se habló hace poco de que le habían manoteado una caja que fue parte para Grabois y parte para Arroyo.
Ni Cristina ni Alberto aparentemente están de acuerdo con la gestión que viene llevando a cabo la ministra. Se está barajando que la reemplace Ferraresi, el actual intendente de Avellaneda y ya es sabido que este personaje no representa a Alberso, sino a la jefa.
Ferraresi es Maduro o Chávez señala Feinmann, en una plaza del municipio al que representa tiene hasta una plaza bolivariana, Esto retrata la posición política de este personaje, como cuando se hizo tomar la jura por niños y juro en nombre de Néstor y Perón, muy poco serio.
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La personalidad política, dice Joni, es mucho más profunda que la ideología, y la del intendente de Avellaneda se puede percibir cuando se refiere a Venezuela como una democracia y no una dictadura.
También se habla de un enroque del BCRA a AFIP en cuanto a cambios de gabinete, De Pont se pasaría de un organismo a otro. Pesce también viene en el ojo de la tormenta hace rato y a Cristina es de público conocimiento que no le gusta.
Aparentemente la carta de la jefa está haciendo el efecto que ella esperaba, de a poco los funcionarios que no funcionan van dejando los puestos que ocupaban, con esto queda clarísimo quien manda