Jony Viale y Feinmann aniquilan a los K.
La gente está harta del COVID, este año claramente está peleando cabeza a cabeza con el 2001, estamos perdiendo un año, ni hablar en términos de educación, hicos sin escolaridad durante un año, aparentemente Trotta está buscando cambiar el chip.
No hay vuelta que darle, comentan las clases deben empezar, ahora hay otra cuestión que son los gremios, que para variar no quieren salir a labura.
Hoy salió un sindicalista a decir que para que vuelvan las clases tienen que bajar los caos porque las escuelas no son un shopping y agrego que es insolito que Massa le pida a los docentes que vayan a dar clase a las escuelas en medio del avance de la pandemia.
El cuestionamiento viene de la idea de que no están considerando la educación como esencial, la idea es que los pibes se sigan educando y vuelvan a las aulas con las medidas sanitarias correspondientes, la educación de un país lo es todo, tienen que buscarle la vuelta, los chicos no pueden estar más sin clases.
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Un informe de la Facultad de Psicología (UBA) arroja que el estado de ánimo de los chicos viene en baja, se le pidió a los padres que mediante una encuesta definan el estado de animo de sus hijos y los términos que más surgieron fueron: cansado, ansioso, aburrido, triste, incertidumbre, angustia, hartos, deprimidos y preocupados.
No hay una palabra positiva, la escuela, agregan los conductores, no es solo un espacio de aprendizaje, es un espacio donde los chicos juegan y sociabilizan, hace 7 meses que están encerrados.
Al conocimiento no hay con que darle, es sumamente importante en un país, la materia gris de un país, el recurso humano es todo y lo estamos perdiendo. ¿O será que a este gobierno les conviene crear ignorantes para asegurarse su futuro en el poder?