Para Milei la fuerza de una epidemia se mide por dos canales, por un lado a responsabilidad de los individuos ante los protocolos y por el otro el estado de bienestar que se debe hacer cargo de los testeos y de las vacunas.
El resultado de vacunar poco y testear mucho menos son las restricciones que están a la vista, las medidas que les queda tomar a este gobierno kuka por no haberse ocupado de nuestra salud.
No dieron la posibilidad al sector privado de que compre las vacunas, algo que le hubiera facilitado al Estado estar presente en aquellos lugares más necesitados.
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