Baby y Joni le pegan a Dady por haberse vuelto tan fanático y radical K y resaltan que Kretina se dedicó a inyectar odio en todos los argentinos para armar la grieta que tenemos.
Coinciden en que lo que más rechazo les genera es la soberbia de la Jefa a diferencia de Máximo que no tiene tanto odio cargado, pero a quien nunca votaría ni quisiera que gane una elección o el mismo Sergio Massa que tampoco destila odio y con el que se puede dialogar.
Baby cuenta que por ejemplo con el Chino Navarro con el que terminaron amigos a pesar de que piensan totalmente distinto y con el que se puede hablar, pero hay otros como D’elia que son hasta cómicos.
Seguramente todos estos, como Dady creer que la Vice los mira y los debe admirar, es como un síndrome de los que le hablan a Kretina, que se fanatizan.
Otro ejemplo que ponen es el de Menem que era un tipo encantador pero con el que no comulgaron con sus ideas, ni tampoco generó ninguna grieta y se destacó como uno de los mejores políticos para Baby por ser “encantador”.
A la vice le temen más que lo que la idolatran o respetan, por eso van desplegando el relato y castigando a los que se cruzan en su camino.
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