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Gonzalito cuenta la movida kuka para quedarse con la guita de las obras públicas. Hay empresas que certificaron las obras en cuestión y funcionarios metidos en el medio que han puesto su firma. Por suerte la justicia ya está actuando, esta situación se dio en el Municipio de Pilar
Gonzalo se hizo presente en el lugar para pedir las explicaciones pertinentes. Resulta que existe algo llamado rendición de cuentas que se trata de un balance en donde los gobiernos están obligados a presentar a fin de año. En el mismo debe figurar el trabajo realizado durante el mismo acompañado de los gastos correspondientes.
Lo que se puede ver en el documento presentado son ordenes de pagos, pagos efectuados, pagos cobrados por una obra que nunca existió. el tema está en que estas obras están certificadas y no existen y la suma que dicen haber gastado son 1000 millones de pesos, no es una suma menor.
Planta potabilizadora, calles asfaltadas y plazas son algunas de las obras invisibles que tanto le costaron al municipio. Las obras no están y la plata tampoco. Es el tribunal de cuentas el que debe ocuparse de esta cuestión y hace la vista gorda, porque los pagos figuran absolutamente todos pero las obras son inexistentes.
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La empresa que se encuentra sospechada es TORDEL SA es oriunda de Pilar y se la conoce básicamente por haber hecho obra pública o mejor dicho, por no hacerlas pero si cobrarlas. Gonzalo quiso constatar datos e la empresa como la ubicación y se encontró con que la empresa ya no funciona en el lugar
El paradero de la empresa a esta altura resulta inexistente, ocurre lo mismo con los números de teléfono ligados a esta, es como si a la empresa y a sus responsables se los hubiera tragado la tierra con 1000 millones de pesos en los bolsillos