María Laura Santillán se volvió totalmente loca por la nueva reaparición pública de Cristina intentando atribuirse a ella y solo a ella la victoria en las elecciones y terminó prendiendola totalmente fuego a ella y a Máximo Kirchner, que no hizo nada más que intentar dinamitar todo el armado de los kukas para sacar la mayor cantidad de cargos posibles y no hizo nada en toda la campaña. Cristina se intenta atribuir solo a ella y a Máximo la victoria cuando la realidad es que los K pusieron absolutamente todo el aparato a funcionar, desde los micros hasta las boletas truchas, absolutamente todo pusieron a andar para poder sacar la mayor cantidad de votos posible, y ahí sale Cristina a intentar atribuirse la victoria en el búnker blue, que era la calle de su mismo departamento en el que estaban los militantes abajo que estaban alimentandose a base de choripanes que probablemente tocaron el piso y no aceptan que Cristina está condenada
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