Milei encabezó el acto de Juramento por el Día de la Bandera y tiró una bomba gigante contra todos los políticos que desde siempre usaron a las fuerzas armadas y la seguridad del país como chivo expiatorio para poder bajarle el presupuesto a la defensa y seguridad del país. Mientras las amenazas externas solamente crecían, los Desgobiernos K le dedicaban más presupuesto a otros ministerios, como el de género, antes que darle una cantidad decente de dinero a la seguridad. Claramente esta política lo único que hizo, y tenía el objetivo de, demonizar a las fuerzas armadas. Con el Gobierno de Milei se terminó esto, ahora las fuerzas de seguridad están siendo cuidadas, tienen el presupuesto que se merecen y todo está yendo para mejor en esa política. Pasamos de tener una policía federal la cual siempre quedaba sin poder hacer nada por decisión de los K a que ahora puedan actuar contra el crimen organizado, cosa que obviamente a los kukas no les gusta
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